Estoy que no quepo en mi... bueno, algo así.
Resulta ser que en ésta mi segunda gira de trabajo por esta frontera: tierra de los burritos, de Juan Gabriel, El Chamizal (territorio recuperado por México en 1967), de la excelente crónica de viajes del amigo escribicionista, y de otras cuestiones mucho menos agradables como Las Muertas de Juárez, Manuel Espino etc., debido a su privilegiada posición geográfica, es posible conseguir con relativa facilidad algunas bebidas que en el DFectuoso serían casi imposibles, a saber: D&W y Coca-Cola Classic [en esta categoría habría entrado hasta hace algunos meses el Dr. Pepper, pero ya es posible conseguirlo hasta en el STC Metro].
Sí, así es, la Coke gringa pues, aunque ustedes no lo crean, sabe muuuuy pero muuuuuy diferente a la que consumimos en México. No mejor, ni peor, simplemente diferente y pues sólo me resta decir que soy fan.
[Nota: llevaba toda la semana buscando las referidas bebidas mientras hacía una obligatoria escala técnica en la que degustaba, -generalmente- un burrito de "guisada", cuidando, of course, que la corbata del día no se ensuciara].
[Nota: llevaba toda la semana buscando las referidas bebidas mientras hacía una obligatoria escala técnica en la que degustaba, -generalmente- un burrito de "guisada", cuidando, of course, que la corbata del día no se ensuciara].
Bueno, bueno... pero ello no es el tema central de este post sino que, justamente cuando me encontraba pagando mis bebidas a los vendedores de un puesto ambulante, ubicado frente a una de las naves industriales de la zona más septentrional de la ciudad, escuché decir claramente a una señora de unos cincuenta y tantos años, sin un diente frontal superior [chimuela, pues]: "Miiijo, dele este cambio al mushasho doctor" [Cf. añada acento chihuahuense, es decir, sustituya la "ch" por "sh"] .
Obviamente, me quedé con la cara Josef #222 [I beg your pardon? / ¿Escuché bien? / pardone-moi?] . Y sí, lo esuché de nuevo. Inmediatamente el obediente pre-adolescente me entregó las monedas con un claro: "aquí tiene, doctor". Luego, la señora en cuestión hace el favor de interrumpir mi ausencia mental y me dice: "Pues qué, ¿a poco no es usted doctor?".
Le respondo que no, que soy (un simple y mortal) periodista-internacionalista. "¡Ah!... ¿y eso qué es?".
(Plop)
Obviamente, me quedé con la cara Josef #222 [I beg your pardon? / ¿Escuché bien? / pardone-moi?] . Y sí, lo esuché de nuevo. Inmediatamente el obediente pre-adolescente me entregó las monedas con un claro: "aquí tiene, doctor". Luego, la señora en cuestión hace el favor de interrumpir mi ausencia mental y me dice: "Pues qué, ¿a poco no es usted doctor?".
Le respondo que no, que soy (un simple y mortal) periodista-internacionalista. "¡Ah!... ¿y eso qué es?".
(Plop)