viernes, 1 de diciembre de 2006

Realmente Amor (Love Actually)

Una de las películas que gusto de ver, y no precisamente porque evoque "el espíritu de las festividades", –aunque reconozco que tiene algunas partes que creo están de sobra–, es Realmente Amor (Love Actually, 2003) .

Sí, muchos coincidirán en que es un filme que raya en el extremo de lo cursi; sí, pareciera que fue hecho exprofeso para el mercado de las fiestas –y compras– decembrinas, también pareciera ser cierto que a este blockbuster dirigido y escrito por Richard Curtis buscaron retacarle hasta su máximo posible la "justificación" de que se trata de una historia –mejor dicho, 10 historias– navideñas.

Pero no se si sea debido a que Curtis fue también el guionista de otra de la magistral: Cuatro Bodas y Un Funeral (Four Weddings and a Funeral, 1994), o director del hilarante Diario de Bridget Jones (Bridget Jones's Diary, 2001), y sea su consiguiente estilo de dirección lo que hizo que éste largometraje no sólo haya sobrevivido al olvidable attaché de las películas navideñas; y en cambio, sea hoy en día una referencia obligada dentro de la categoría de comedias románticas.


Este rompecabezas de historias inicia, precisamente parodiando el tema principal de las Cuatro Bodas y un Funeral: Love is all Arround, sólo que "adaptándolo" a las navidades, todo para que una ex estreña del punk, ex adicto a la heroína, Billy Mack (Bill Nighy), el personaje más divertido del filme, pueda volver a recuperar aunque sea un poco de su ya olvidada fama.

De ahí, la historia cambia a la de Jamie (Colin Firth –en su papel de siempre–) un escritor que está por salir de su casa para asistir a una boda; de ahí, nos mueven a un edificio de oficinas para presentarnos a Colin Frissell (Kriss Marshall), un desesperado y osbsesivo treintón –perro, en lenguaje coloquial mexicano– que busca llamar la atención de cualquier fémina por cualquier medio; la cámara se mueve ahora para presentar a Mark (Andrew Lincoln) y a Peter (Chiwetel Ejiofor) quienes están platicando de las desventuras de la despedida de soltero de éste último momentos antes de iniciar la ceremonia en la que contraerá matrimonio con la bellísima Juliet (Keira Knightly), y así sucesivamente la historia va pasando agilmente de historia en historia durante poco más de dos horas hasta su desenlace.

Hay muchas escenas que considero de mis favoritas, como aquella de la boda en la que a los novios, al final de la ceremonia, sorpresivamente les cantan una de las mejores canciones de The Beatles: All you need is love.


O aquella en la que un chavito de como 11 años, Sam (Thomas Sangster) está al parecer encerrado en una depresión por la súbita muerte de su mamá... Y cuando todo parece indicar que así es, y su padrastro (Liam Neeson) también así lo cree, resulta que que el precoz joven en realidad está enamorado y dispuesto a cualquier cosa para que la niña en cuestión le haga caso.



Y que decir de las escenas en las que el protagonista es Hugh Grant en el papel de un Primer Ministro del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del norte, soltero, que está enamorado de una de sus asistentes, Natalie (Martine McCutcheon) y que, tras darle un un revés diplomático al presidente de los Estados Unidos (Billy Bob Thorton) se pone a festejar, a semejanza de Tom Cruise en Risky Bussiness, bailando por toda la residencia oficial de Downing Street.


O aquella otra en la que se dispone a buscar a la mencionada Natalie por la "calle más larga de todo Londres", puerta por puerta y casa por casa, y en una de estas un trío de niñas lo orillan a cantar villancicos.


Y así podría seguir enumerando los pequeños y grandes momentos de esta obra cinematográfica, de la cual, también su banda sonora, compuesta por Craig Armstrong, y el soundtrack recopilado para la misma son inovidables.

De éste, el mejor de los temas es, sin duda, Songbird, interpretado por Eva Cassidy, pero no por ello son de menor importancia canciones como Too lost in you de Sugababes, Turn me on de Norah Jones; grandes clásicos como Both Sides Now (era uno de los temas de la TV serie The Wonder Years) de Joni Mitchel, y God only knows de los Beach Boys; o básicos navideños como White Christmas de Otis Redding, All I want for Christmas is you en la interpretación de Olivia Olson, All Alone on Christmas de Darlene Love, entre otros.
Realmente, una buena película y música para disfrutar en cualquier época del año y circunstancia.

Ficha técnica.
Realmente Amor (Love Actually, 2003).
Director: Richard Curtis.
Protagonistas: Hugh Grant, Colin Firth, Alan Rickman, Keira Knightly, Ema Thompson, Laura Linney, Liam Neeson, Martine McCutcheon, Bill Nighy, Andrew Lincoln, Rowen Atkinson, etc.
Duración: 129 minutos.

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