¿Recuerdan el escándalo que se armó en el 2000 cuando nuestro actual Presidente Fox lanzó como imagen de su gobierno la hoy famosísima águila mocha en una flagrante violación a la Ley sobre el escudo, la bandera y el himno nacionales? ¿No? Entonces vean cualquier papelería o logo de oficinas de este "gobierno del cambio".
Afortunadamente, los legisladores del PRI, PRD, PT y PVEM evitaron que, el presichente llegara más lejos, ya que pretendía se aprobara un edicto para que, en cada evento al que asistiese, a su entrada y salida, se tocara como música de fondo ¡¡el himno nacional!!
Dicha idea foxiana, no crean que es nueva. El Presidente de los Estados Unidos de América tiene su propia marcha presidencial desde 1812 denominada "Hail to the Chief", la cual se usa para diversas ocasiones además de la ya mencionada.
En contraste, el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, demostró que el poder de su mano izquierda -léase que es zurdo-, y de la izquierda venezolana también, sí pudo cambiar no sólo el nombre del país, sino también los símbolos patrios de esa nación.
La bandera de la hoy República Bolivariana de Venezuela -otro invento "bolivariano" de Chávez-, diseñada por Juan Crisótomo Falcón (1820-1870) constaba, hasta el 9 de marzo de 2006, de tres franjas horizontales: la amarilla, que simboliza "las riquezas del territorio"; la azul, que representa "el mar que separa la Venezuela de España" con siete estrellas, que a su vez, son "las 7 provincias originales que apoyaron a Simón Bolivar (1783-1830) y susbribieron en Acta de Independencia del 5 de Julio de 1811"; y la roja, que es "la sangre derramada por los patriotas en la Independencia".
Contenía además un escudo en el lado superior izquierdo que constaba de tres "cuarteles". El primero, el rojo, "contiene la figura de un manojo de espigas, como símbolo de la unión de los Estados de la República y de la riqueza de la Nación"; en el amarillo, "emblema del triunfo, figuran las armas: dos pabellones, una espada y una lanza entrelazados por una corona de laurel"; el último pabellón, y el más grande, el azul, contenía un "caballo indómito" galopando rumbo a la derecha, pero volviendo su cabeza hacia la izquierda, que "representa la independencia y la libertad de la nación"; arriba de éstos, yacen dos cuernos de la abundancia, y en sus partes laterales las figuras de una rama de olivo, a la derecha, y de una palma, a la izquierda, atadas por la parte inferior con una cinta que lleva los colores nacionales.
La Razón del cambio.
Según el propio Chávez, quien aseveró se puso a estudiar el tema "a conciencia" a raíz de que su hija Rosinés le preguntó "¿Por qué el caballo tuerce la cabeza hacia atrás?", el equino del escudo nacional originalmente corría hacia la izquierda "como debe ser"; en cambio, el otro, "no es venezolano, sino un imperial, dócil e infiltrado de la derecha oligárquica", por lo que pidió modificar urgentemente los símbolos patrios para que quedaran de la siguiente forma:
A la bandera nacional, se le añadió una estrella más (para llegar a 8) que, según los deseos de Bolivar, y explicado por éste en un decreto de 1817, se debía incluir a la provincia de Guyana en el símbolo patrio, y que no se había hecho hasta ahora.
Al escudo, en su cuartel rojo, de 20 espigas de trigo, pasó a 24, que represantan el número de estados del país; en el amarillo, se agregaron un arco, un carcaj y un machete, en reconocimiento a las armas de los indígenas y negros en sus luchas y labores; al azul, se cambio el galopar, por una carrera presurosa del corcel blanco hacia la izquierda; y finalmente, a los cuernos de la abundancia se les añadieron, en uno, la orquidea, que es la flor nacional; y al otro, frutas tropicales como el cacao.
Todos estos cambios fueron aprobados sin discusión ni debate por parte de la Asamblea Nacional -lo que aquí equivale a la Cámara de Diputados- y puestos en marcha el 12 de marzo (Día de la Bandera). Así que, en los próximos 5 años, gracias a esta reforma chavista, Venezuela deberá cambiar: papelería oficial, monedas y billetes, sellos postales, uniformes militares, libros de texto, la banda presidencial y el collar del Primer Mandatario, que en este 2006, buscará, por la vía de la democracia su reelección por cuatro años más... ¡Ah!, pero se le olvidó que en una democracia, el pueblo es el que decide, y al menos en el caso de los símbolos patrios, no se consultó ni se convocó a un referendum.
La historia: juez, verdugo y ejecutor mostrará, a su debido tiempo, las consecuencias de este tipo de decisiones personalistas basadas en la necedad de su bolivariana majestad, que a la usanza del general Antonio López de Santa Anna, busca convertir sus anhelos personales en ley.
Algunos sitios de interés (blogs) de venezolanos:
Terreno Baldío.
Liberal Venezolano.
Dreamer in Rebuiling.
PAFA.
Venezolano Puro.
Lobohombre Riera.
Afortunadamente, los legisladores del PRI, PRD, PT y PVEM evitaron que, el presichente llegara más lejos, ya que pretendía se aprobara un edicto para que, en cada evento al que asistiese, a su entrada y salida, se tocara como música de fondo ¡¡el himno nacional!!
Dicha idea foxiana, no crean que es nueva. El Presidente de los Estados Unidos de América tiene su propia marcha presidencial desde 1812 denominada "Hail to the Chief", la cual se usa para diversas ocasiones además de la ya mencionada.
En contraste, el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, demostró que el poder de su mano izquierda -léase que es zurdo-, y de la izquierda venezolana también, sí pudo cambiar no sólo el nombre del país, sino también los símbolos patrios de esa nación.
La bandera de la hoy República Bolivariana de Venezuela -otro invento "bolivariano" de Chávez-, diseñada por Juan Crisótomo Falcón (1820-1870) constaba, hasta el 9 de marzo de 2006, de tres franjas horizontales: la amarilla, que simboliza "las riquezas del territorio"; la azul, que representa "el mar que separa la Venezuela de España" con siete estrellas, que a su vez, son "las 7 provincias originales que apoyaron a Simón Bolivar (1783-1830) y susbribieron en Acta de Independencia del 5 de Julio de 1811"; y la roja, que es "la sangre derramada por los patriotas en la Independencia".
Contenía además un escudo en el lado superior izquierdo que constaba de tres "cuarteles". El primero, el rojo, "contiene la figura de un manojo de espigas, como símbolo de la unión de los Estados de la República y de la riqueza de la Nación"; en el amarillo, "emblema del triunfo, figuran las armas: dos pabellones, una espada y una lanza entrelazados por una corona de laurel"; el último pabellón, y el más grande, el azul, contenía un "caballo indómito" galopando rumbo a la derecha, pero volviendo su cabeza hacia la izquierda, que "representa la independencia y la libertad de la nación"; arriba de éstos, yacen dos cuernos de la abundancia, y en sus partes laterales las figuras de una rama de olivo, a la derecha, y de una palma, a la izquierda, atadas por la parte inferior con una cinta que lleva los colores nacionales.
La Razón del cambio.
Según el propio Chávez, quien aseveró se puso a estudiar el tema "a conciencia" a raíz de que su hija Rosinés le preguntó "¿Por qué el caballo tuerce la cabeza hacia atrás?", el equino del escudo nacional originalmente corría hacia la izquierda "como debe ser"; en cambio, el otro, "no es venezolano, sino un imperial, dócil e infiltrado de la derecha oligárquica", por lo que pidió modificar urgentemente los símbolos patrios para que quedaran de la siguiente forma:
A la bandera nacional, se le añadió una estrella más (para llegar a 8) que, según los deseos de Bolivar, y explicado por éste en un decreto de 1817, se debía incluir a la provincia de Guyana en el símbolo patrio, y que no se había hecho hasta ahora.
Al escudo, en su cuartel rojo, de 20 espigas de trigo, pasó a 24, que represantan el número de estados del país; en el amarillo, se agregaron un arco, un carcaj y un machete, en reconocimiento a las armas de los indígenas y negros en sus luchas y labores; al azul, se cambio el galopar, por una carrera presurosa del corcel blanco hacia la izquierda; y finalmente, a los cuernos de la abundancia se les añadieron, en uno, la orquidea, que es la flor nacional; y al otro, frutas tropicales como el cacao.
Todos estos cambios fueron aprobados sin discusión ni debate por parte de la Asamblea Nacional -lo que aquí equivale a la Cámara de Diputados- y puestos en marcha el 12 de marzo (Día de la Bandera). Así que, en los próximos 5 años, gracias a esta reforma chavista, Venezuela deberá cambiar: papelería oficial, monedas y billetes, sellos postales, uniformes militares, libros de texto, la banda presidencial y el collar del Primer Mandatario, que en este 2006, buscará, por la vía de la democracia su reelección por cuatro años más... ¡Ah!, pero se le olvidó que en una democracia, el pueblo es el que decide, y al menos en el caso de los símbolos patrios, no se consultó ni se convocó a un referendum.
La historia: juez, verdugo y ejecutor mostrará, a su debido tiempo, las consecuencias de este tipo de decisiones personalistas basadas en la necedad de su bolivariana majestad, que a la usanza del general Antonio López de Santa Anna, busca convertir sus anhelos personales en ley.
Algunos sitios de interés (blogs) de venezolanos:
Terreno Baldío.
Liberal Venezolano.
Dreamer in Rebuiling.
PAFA.
Venezolano Puro.
Lobohombre Riera.
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